Señores periodistas:
La realidad sobre la crisis que actualmente vivimos en Honduras está siendo tergiversada y hace ver al Ex-Presidente Zelaya como un abanderado de la democracia, la legalidad y los pobres. Nada más alejado de la verdad.
Yo soy un hondureño, viudo y de la tercera edad, y ya poco me importa lo que me pueda pasar a mí en lo personal. Pero tengo hijos y nietos a quienes adoro y para quienes deseo una vida en paz, democracia y libertad y, de hacerse realidad el deseo expresado por algunos Jefes de Estado de imponernos nuevamente a Mel Zelaya como Presidente, pasaría lo que sucedió en Venezuela, en donde, en nombre de la democracia, forzaron el retorno de Chávez al poder y se ha eternizado en él, con las consecuencias que ya todos conocemos. Pero en Honduras lo tenemos bien claro: No hay “Mel” que dure cien años ni pueblo que lo resista.
Lo que sucedió en Honduras no fue un golpe de Estado, sino la culminación de un proceso iniciado por la sociedad civil: iglesias, gremios, estudiantes, mujeres organizadas, periodistas y todo un pueblo, sin distinción de clases, que en su inmensa mayoría, clamó para poner fin a las arbitrariedades y al irrespeto de la Constitución y de las leyes por el Gobierno de Zelaya. Zelaya hizo caso omiso de la ley y desconociendo los fallos de los tribunales de la República, quizo hacernos ir a una "encuesta", violando la ley y con un procedimiento que no tenía garantía alguna para evitar un fraude. De hecho, los empleados públicos fueron forzados a firmar el voto afirmativo so pena de ser destituidos y la gente pobre no era atendida en los hospitales públicos si no firmaban su apoyo a la encuesta. De manera que esa encuesta, además de ilegal, era fraudulenta y abusiva.
Señores periodistas:
La realidad sobre la crisis que actualmente vivimos en Honduras está siendo tergiversada y hace ver al Ex-Presidente Zelaya como un abanderado de la democracia, la legalidad y los pobres. Nada más alejado de la verdad.
Yo soy un hondureño, viudo y de la tercera edad, y ya poco me importa lo que me pueda pasar a mí en lo personal. Pero tengo hijos y nietos a quienes adoro y para quienes deseo una vida en paz, democracia y libertad y, de hacerse realidad el deseo expresado por algunos Jefes de Estado de imponernos nuevamente a Mel Zelaya como Presidente, pasaría lo que sucedió en Venezuela, en donde, en nombre de la democracia, forzaron el retorno de Chávez al poder y se ha eternizado en él, con las consecuencias que ya todos conocemos. Pero en Honduras lo tenemos bien claro: No hay “Mel” que dure cien años ni pueblo que lo resista.
Lo que sucedió en Honduras no fue un golpe de Estado, sino la culminación de un proceso iniciado por la sociedad civil: iglesias, gremios, estudiantes, mujeres organizadas, periodistas y todo un pueblo, sin distinción de clases, que en su inmensa mayoría, clamó para poner fin a las arbitrariedades y al irrespeto de la Constitución y de las leyes por el Gobierno de Zelaya. Zelaya hizo caso omiso de la ley y desconociendo los fallos de los tribunales de la República, quizo hacernos ir a una "encuesta", violando la ley y con un procedimiento que no tenía garantía alguna para evitar un fraude. De hecho, los empleados públicos fueron forzados a firmar el voto afirmativo so pena de ser destituidos y la gente pobre no era atendida en los hospitales públicos si no firmaban su apoyo a la encuesta. De manera que esa encuesta, además de ilegal, era fraudulenta y abusiva.
Al declarar el Tribunal de lo Contencioso Administrativo la ilegalidad de la acción de Mel, este insistió, ordenando a las Fuerzas Armadas que participaran en la encuesta, a lo que estas se negaron, dado que había un fallo del citado tribunal y del Tribunal de alzada declarando ilegal ese acto y prohibiéndoles participar en ella. Eso desencadenó el proceso que logró la destitución de Zelaya, con la votación unánime de todos los diputados del Congreso de la República presentes en la sesión del día de ayer, atendiendo al fallo de la Corte Suprema de Justicia y a los dictámenes de la Fiscalía General, la Procuraduría (abogada del Estado), el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos y ewl Tribunal Supremo Electoral. Las Fuerzas Armadas solo cumplieron con la orden que les fue dada, en el respeto de nuestras leyes, para evitar que al día siguiente, se disolvieran los poderes del Estado y el Ejecutivo gobernara por decreto, tal como lo amenazó Zelaya EN PRESENCIA DEL EMBAJADOR AMERICANO, HUGO LORENZ, cuando quiso imponer al Congreso Nacional sus candidatos para ocupar los cargos de Magistrados de la Corte, hace apenas unos meses. En esa ocasión, gracias igualmente a la firmeza de los Diputados y al apoyo de la Sociedad Civil, logramos que se nombrara una Corte que ha demostrado su independencia y su respeto a la ley.
Señores periodistas: Para la inmensa mayoría de los hondureños, el Gobierno de Manuel Zelaya ha sido una desgracia: despilfarró todos los recursos de la Estrategia para la Reducción de la Pobreza,. de los cuales apenas un 3% llegó a los más necesitados; usó de los recursos nacionales como si fueran de su propio peculio; corrompió al país e hizo todo lo posible por deslegitimar nuestras instituciones: dividió y enfrentó a la nación hondureña e inclusive convirtió a nuestro país en una gran pista de aterrizaje para el tráfico de drogas. Solo en lo que va del año, dieciseis (16) aviones con bandera venezolana han sido encontrados estrellados o quemados, después de dejar su cargamento de drogas en el territorio nacional. El contenido de los mismos era demasiado grande para que lo pudiera aspirar el Presidente Zelaya y sus amigos en sus francachelas, por lo que no cabe duda cual era el destino de esa droga (Toda esta información puede ser corroborada en la prensa nacional) De paso, nos preguntamos cuántos aviones cargados de cocaína habrán enviado desde Venezuela a Honduras durante el Gobierno de Zelaya? .
Es curioso que cuando se destituyó a los Presidentes Assad Bucaram, de Ecuador, Collor de Melo, de Brasil y Jorge Serrano Elías, de Guatemala, e inclusive al Presidente Nixon, de los Estados Unidos de América, no se hiciera lo que se nos está queriendo hacer a nosotros. Sería quizás porque no eran amigos del grupo de Chávez y los hermanos Castro?
Pues en nuestro país, hemos destituído, por la vía legal, sin derramar sangre, a quien quería seguir los pasos de su paradigma, Hugo Chávez. y el golpe no fue dado para que los militares asumieran el poder, sino para preservar el orden constitucional y legar a nuestros hijos un país en paz y democracia.
Yo les ruego, señores, estudien bien la situación de nuestro país, vengan a Honduras sin prejuicios, informen con responsabilidad y apegados a la verdad y no se conviertan en cómplices inocentes de sátrapas como Chávez y Castro y, sobre todo, estén vigilantes para que no nos suceda lo que a nuestros hermanos venezolanos.
Para finalizar, quiero decirles que los hondureños no permitiremos que se nos imponga desde el exterior una tiranía. Resistiremos hasta cuando sea necesario y haremos que el Presidente Micheletti finalice el período de Zelaya y garantice, como estamos seguros de que lo hará, la celebración de las elecciones fijadas para el último domingo de noviembre del año en curso, para que en enero asuma el Presidente a quien elijamos libremente los hondureños.
Atentamente,
Jaime Güell
Señores periodistas: Para la inmensa mayoría de los hondureños, el Gobierno de Manuel Zelaya ha sido una desgracia: despilfarró todos los recursos de la Estrategia para la Reducción de la Pobreza,. de los cuales apenas un 3% llegó a los más necesitados; usó de los recursos nacionales como si fueran de su propio peculio; corrompió al país e hizo todo lo posible por deslegitimar nuestras instituciones: dividió y enfrentó a la nación hondureña e inclusive convirtió a nuestro país en una gran pista de aterrizaje para el tráfico de drogas. Solo en lo que va del año, dieciseis (16) aviones con bandera venezolana han sido encontrados estrellados o quemados, después de dejar su cargamento de drogas en el territorio nacional. El contenido de los mismos era demasiado grande para que lo pudiera aspirar el Presidente Zelaya y sus amigos en sus francachelas, por lo que no cabe duda cual era el destino de esa droga (Toda esta información puede ser corroborada en la prensa nacional) De paso, nos preguntamos cuántos aviones cargados de cocaína habrán enviado desde Venezuela a Honduras durante el Gobierno de Zelaya? .
Es curioso que cuando se destituyó a los Presidentes Assad Bucaram, de Ecuador, Collor de Melo, de Brasil y Jorge Serrano Elías, de Guatemala, e inclusive al Presidente Nixon, de los Estados Unidos de América, no se hiciera lo que se nos está queriendo hacer a nosotros. Sería quizás porque no eran amigos del grupo de Chávez y los hermanos Castro?
Pues en nuestro país, hemos destituído, por la vía legal, sin derramar sangre, a quien quería seguir los pasos de su paradigma, Hugo Chávez. y el golpe no fue dado para que los militares asumieran el poder, sino para preservar el orden constitucional y legar a nuestros hijos un país en paz y democracia.
Yo les ruego, señores, estudien bien la situación de nuestro país, vengan a Honduras sin prejuicios, informen con responsabilidad y apegados a la verdad y no se conviertan en cómplices inocentes de sátrapas como Chávez y Castro y, sobre todo, estén vigilantes para que no nos suceda lo que a nuestros hermanos venezolanos.
Para finalizar, quiero decirles que los hondureños no permitiremos que se nos imponga desde el exterior una tiranía. Resistiremos hasta cuando sea necesario y haremos que el Presidente Micheletti finalice el período de Zelaya y garantice, como estamos seguros de que lo hará, la celebración de las elecciones fijadas para el último domingo de noviembre del año en curso, para que en enero asuma el Presidente a quien elijamos libremente los hondureños.
Atentamente,
Jaime Güell